En lo referente a los contratos laborales, existen varias clases de contrato, cada cual con sus características específicas. Igualmente, en lo tocante a los contratos mercantiles ocurre lo mismo, existen distintas clases también con unas características bien definidas. El mero hecho de conocer las diferencias entre ellos, te va a permitir saber qué tipo de contrato mercantil es el que mejor se adapta a tus necesidades dependiendo de lo que estés buscando. No obstante, si tienes dudas, te recomendamos que acudas a tus procuradores y abogados en Cataluña para resolverlas adecuadamente.

A tal efecto, desde Domingo Advocats queremos arrojar un poco más de claridad acerca de este tema, que puede llegar a ser muy confuso para todas aquellas personas que no estén informadas de la legislación existente al respecto. Sigue leyendo y te mostramos las diferencias entre todos los contratos mercantiles.

¿Qué clases distintas de contratos mercantiles podemos encontrar en la actualidad?

Como decimos, hay distintos tipos de contratos mercantiles, cada uno atendiendo a unos criterios específicos que te podremos explicar si necesitas la ayuda de nuestros abogados en Barcelona. Estos son los distintos contratos que debes conocer principalmente.

Contrato de compraventa

En el contrato de compraventa el vendedor debe entregar un objeto a cambio de un precio, que puede ser una cantidad económica o en especie que recibirá del comprador. Para que este contrato sea mercantil tiene que:

• Tratarse de un bien, o sea, un objeto.
• Cuando se compra el producto, se debe dar el precio bien en el momento o bien más adelante, pero en un momento cierto, fijado en el contrato.

La diferencia con el contrato de compraventa civil es que en este último los bienes objetos del contrato se compran para el consumo, mientras que en la compraventa mercantil el objetivo del contrato es lucrativo: se compra para enriquecerse.

Contrato de Franquicia

Establece una forma de colaboración contractual entre dos empresas. Una de las dos es la titular de una marca o actividad, y concede a la otra empresa (el franquiciado) el derecho de explotación durante un tiempo y en un ámbito geográfico bajo unas normas y condiciones. A cambio, el franquiciado paga una cantidad de dinero.

Para que se pueda llevar a cabo, el titular transmitirá una licencia con derechos de exclusiva, que estarán definidos en el contrato de franquicia.

Contrato mercantil de agencia

Aquí una persona natural o jurídica contrae una obligación continuada o estable a cambio de una remuneración, a cambio de ofrecer sus servicios a una empresa. La Ley que regula este contrato obliga a que al extinguirse, el que ofrece los servicios tenga derecho a indemnización siempre y cuando se cumplan los requisitos que establece la ley.

Contratos mercantiles de comisión

El firmante de este contrato, el comisionista, podrá realizar dicha tarea en su nombre o en el de un comitente. Si lo hace en nombre propio no necesitará declarar quién comite y tendrá la obligación directa, como si se tratase de su propio empresa, con la persona con quien contrate.

La comisión se acepta cuando el comisionista ejecuta alguna gestión que no sea la custodia y conservación de aquello remitido por el comitente.

Leasing mobiliario o inmobiliario

El leasing es un tipo de contrato complejo en el que los pactos entre las partes son los que rigen la relación contractual. En él se regula la cesión del uso de algún bien por el que el usuario paga cuotas y en el que se contempla la opción de compra del mismo.

En este contrato hay tres partes: la empresa de leasing que financia y firma el contrato con proveedor y usuario, el proveedor que es quien proporciona el bien y el usuario, que es quien firma el contrato con la empresa de leasing.

Como ves, estos son algunos de los principales contratos mercantiles que existen, pero hay más. Para usarlos adecuadamente, lo mejor es que consultes con especialistas abogados en Barcelona y en toda Cataluña. De esta forma podrás resolver todas tus dudas y preguntas